Como atravesar la depresión. (En 20 pasos)

                1° Paso: Tener una pelea, descubrimiento o acción que nos lleve a cuestionar nuestra manera de vivir o a nosotros mismos.
                2° Paso: Obtener un resultado poco animoso, que nos lleve a una depresión. Provocando cortos lapsos de lagrimas, largas horas de música depresiva o incluso consideración del suicidio.
               3° Paso: Llegar a la realización de que uno no es capas de cometer suicidio, de que ya no puede generar mas lagrimas y de que no tiene mas música depresiva que escuchar.
               4° Paso: Tener una conversación con alguien donde uno se muestra cruel y poco misericordioso. Exponiendo puntos débiles de la otra persona de una manera patética y estúpida. Esperando generar algún daño, que pueda ser físico o emocional, en la otra persona.
               5° Paso: Dar algún tipo de disculpa pobre que no sea realmente honesta y reproducir la situación incontables veces mentalmente, para llegar a la conclusión de que uno es una forma de vida detestable.
               6° Paso: Atacarse a uno mismo, enumerando todas las maneras en la que se es imperfecto, horrible y detestable.
              7° Paso: Recordar todas y cada una de las relaciones amorosas y amistades que fracasaron en nuestra vida y culparnos de ellas. Diciéndonos que somos malos para todo aquel que crea un vinculo con nosotros.
              8° Paso: Mirar demasiadas horas de televisión o realizar en exceso cualquier actividad de ocio que no sea productiva. Evitando actividades sociales, de exposición al sol o de actividad física.
              9° Paso: Comer comida de elaboración pobre, accesible y de poco valor nutricional.
             10° Paso: Comer todavía mas comida de elaboración pobre, accesible y de poco valor nutricional.
             11° Paso: Cansarse.
             12° Paso: Cansarse todavía mas.
             13° Paso: Establecer contacto con el mundo exterior.
             14° Paso: Comer comida que no salga de una caja.
             15° Paso: Tener una charla amigable con otro ser humano.
             16° Paso: Comenzar a sentirse mejor sobre uno mismo.
             17° Paso: Realizar actividades bajo el sol que involucren a otras personas.
             18° Paso: Sonreirle a un extraño en el colectivo.
             19° Paso: Conocer a alguien nuevo.
             20° Paso: Seguir con la vida normal de un ser humano funcional hasta que se reinicie el ciclo.

                             Tal vez la mejor manera de vivir sea fugazmente. Tal vez sea abrazar cada momento con intensidad, mirar con asombro. Sentir de una manera tan fuerte que una parte de nosotros se desgarre. Tal vez sea explotar e, inevitablemente, tener que volver a regenerarse. Tal vez se trate de estar loco, y de conocer a gente igual. Tal vez se trate de correr, de movimiento. Tal vez la vida son solo esos momentos; en los que las emociones se vuelven físicas, en los que uno no puede evitar sus acciones, en los que las cosas pasan de maneras tan increíbles que uno no puede ver nada. Momentos que nos invaden, que nos inundan. Momentos en que ardemos furiosamente, en los que somos una luz abrazadora. Tal vez la mejor manera de vivir sea con pasión, con amor y con sufrimiento. Tal vez la mejor manera de vivir sea aceptar cada centímetro de nosotros y explotar.

                  Hay momentos en la vida en los que uno nota el paso del tiempo. Momentos en los que se comprende que una parte de lo que uno era quedo en el pasado y una nueva llego a reemplazarla. Como cuando empezas a entender los chistes que hacen tus tíos en la mesa, en vez de reírte solo por que no queres parecer un niño pequeño. O tomarte un colectivo solo, sin sentirse emocionado por tu independencia. O siendo un niño ateo,  conocer a otro religioso y comprender que la manera en la que todas tus creencias te fueron enseñadas no es la misma que la de tus compañeros de clase.
                Como cuando te explican a donde va la basura que tiras cada día y no poder sentirse aturdido por la falta de sentido que tiene todo el proceso. O como cuando te encontras a vos mismo pensando en el pasado como algo muy lejano. Como cuando te empezas a preguntar quien sos, y cada vez que te formulas la pregunta te encontras un poco mas perdido dentro de ti. Como cuando reconoces tu cuerpo mas adulto y un poco demasiado alejado del piso. Como cuando te sentís pequeño dentro de ti mismo. Como cuando notas que ya no necesitas el banco que antes usabas para llegar al lavamanos del baño.
                Hay momentos en la vida en los que uno  descubre que ya no es lo que era, pero tampoco es lo que esperaba ser. Hay momento es la vida en que uno va mas allá de su pasado, va mas allá de sus expectativas. Hay momentos en la vida en los que uno no se encuentra esperando o comparándose con lo que era. Hay momentos en la vida en los que uno se encuentra simplemente siendo.

             Entonces fue cuando te vi, te vi de una manera graciosa, como si nunca te hubiera visto antes. Vi algo nuevo, algo distinto.Vi a un desconocido. Me vi a mi misma, te vi a vos. Te vi siendo de una manera que nunca había visto ser. Te sentí cerca mio, te escuche respirar. Quise conocerte, quise saber quien eras. Quise tocarte y quise entenderte.  Y me pregunte si podría amarte, me pregunte si podría aceptar cada una de tus partes y hacerlas parte de mi.

Me duele que ya no creas en mi.

Me duele que ya no te importe que lo intente.

Me duele que te niegues a ver lo que soy y que me encierres en tus suposiciones.

Me duele que no entiendas que me siento perdida,

me duele que no veas como sufro.

Me duele tu enojo, casi tanto como me duele el mio.

Me duele resignarme, me duele no intentarlo.

Me duele mi propio miedo.

Me duele no saber quien soy y por eso me duele cuando me lo preguntas.

Me duele estar sola y me duele estar a tu lado.

Me duele que estemos separados, y me duele saber que ya no podemos estar juntos.

                 Recuerdo cuando tenia 5 años,  podía permanecer mirando la tierra por horas. Tocándola  sintiéndola  Solo estando ahí  en conexión con algo mas. Siendo completamente capas de no pensar en nada, de no sentirme asustada ni preocupada. Como si nada mas existiera. Recuerdo mirar hacia el cielo.
                 Ahora no puedo, no puedo simplemente ser, como simplemente era antes. Me escondo, me asusto. Tengo miedo, tengo  miedo pero no se exactamente de que. Siento como si extrañara algo que nunca tuve. Como si me estuviera perdiendo de algo que no puedo encontrar.
                 A veces tengo de nuevo esos momentos, pero siempre hay algo. Siempre hay un pensamiento que me dice que esto se va a terminar, siempre hay una sombra que me dice que es algo que no puedo tener. Entonces una parte de mi niega la existencia de esa paz que siento en ese momento. Una parte de mi me hace no quererlo, me hace olvidarlo. Me hace rechazar lo que no puedo tener. Una parte de mi me hace abrir los ojos a esta realidad. Me hace sentir dolor, por que el dolor es mas real. El dolor es tangible. Una parte de mi me obliga a querer olvidar, por que cuando olvido todo tiene mas sentido.
     

Los otros.

Admítelo. No eres como ellos.

No estas ni siquiera cerca.

Podrás vestirte ocasionalmente como uno de ellos.

Mirar los mismos programas sin importancia de la televisión como ellos.

Tal vez hasta comer la misma comida rápida algunas veces.

pero parece que cuanto mas tratas de encajar, mas te sientes como un forastero,

mirando a la "gente normal" como van en su existencia automática.

Por cada vez que decís oraciones normales como:

"Que tengas un buen día." o "El clima es horrible hoy"

Tienes un añoro interior de decir cosas prohibidas como:

"Dime algo que te haga llorar" o "¿Para que piensas que es el deja vu?"

Enfrentalo, hasta quieres hablar con esa chica en el ascensor.

¿Pero que pasa y si esa chica en el ascensor  y el hombre calvo que pasa junto a tu cubículo en el trabajo, están pensando lo mismo?

¿Quien sabe lo que podrías aprender tomando una oportunidad en una conversación con un extraño?

Todo el mundo carga una pieza del rompecabezas. Nadie llega a tu vida por mera coincidencia.

Confía en tus instintos. Has lo inesperado.

Encuentra a los otros...

Timothy Leary.

      El secreto de escribir es, tal vez, nunca rebelar algo real. No hablar de fechas, ni de nombres. Es mi manera de decir quien soy, sin realmente decirlo. Al escribir se rebela una parte de mi que nadie conoce, que ni siquiera yo logro ver en su totalidad. Al escribir veo, escucho y siento cosas que no puedo sentir de otras maneras. Lo que me hace preguntarme si ese yo del que escribo es real. Si la manera en que escribo puede tomarse como una verdad. Me asusta pensar que mi verdadero yo sea el que muestro al publico todos los días  Me asusta pensar que el yo que escribo sea una fantasía  Tal vez este yo no existe, tal vez esa persona que vive en el mundo real, que ríe  que calla, que espera, sea la realidad. Pero no puedo creer eso, este yo, el que vive en mis palabras, es lo único que tengo.

"Ayer volví, después de tantos años al río.
El agua, la piedras, los árboles, el viento, son los mismos.
Yo ya no soy el mismo.
Ya no me pregunto como será mi destino.
Le debo a Ezequiel el haberme enseñado que la vida no es más que eso: Asomar la cabeza, para ver que pasa afuera, aunque haya tormenta. Y una Suit de Bach."
Antonio Santa Ana.
"Los ojos del perro siberiano."
                  
                La muerte siempre fue algo que tuve muy presente. No por que alguien cercano a mi muriera alguna vez, si no por que he pensado en ella muchas veces en mi vida. Esta frase es sacada de un libro, que trata de un chico que pierde a su hermano por causa del SIDA. Pienso que este libro me ayudo a comprender a la muerte un poco mas, o mejor dicho, a entender la vida.
               Me ayudo a entender el dolor y el significado de crecer. Siempre tuve una facilidad para rendirme a la vida. No por que haya tratado de suicidarme, si no por que el dolor es algo difícil de atravesar para mi. No soy buena con el dolor aunque, por alguna razón, estoy acostumbrada a sentirlo. Estoy acostumbrada a las pesadillas en las que corro de algo sin que nunca me atrape, pero sin nunca estar a salvo. Estoy acostumbrada a esa sensacion de encierro. Y he llegado a acostumbrarme a el momento del sueño en el que encuentro una manera de poner fin a todo. No solo al dolor o al miedo, si no a todo. Es el momento en que una pregunta llega a mi ; ¿Podre terminar con todo? 
             Los escenarios de mis sueños cambian constantemente, pero casi siempre termino en esa descicion. A veces estoy al borde de un abismo, a veces es simplemente parar de correr hasta que lo que me persigue me atrape. Aunque siempre me despierto antes de tomar la descicion.
            Escuche en algún lugar la frase "Tenerle miedo al miedo." No creo que sea eso, no es el miedo lo que me atemoriza, si no el dolor. Le temo a sufrir, y le temo a lo que este dispuesta a hacer para evitarlo.
            Ultimamente ya no creo que tome la descicion de acabar con todo, trato de ser mas valiente. Trato de no perderme en mi dolor, si no de vivir a pesar de el. Trato de soñar un poco mas, de escuchar mas canciones y de leer mas libros. Trato de ser lo mas feliz que pueda, y cuando no es así trato de superarlo. Por que eso es justamente de lo que habla esta frase, la vida es asomar la cabeza aunque haya tormenta. Eso y una Suit de Bach.

"Porque nada me hace mas feliz y nada me entristece mas que tu."
Nicole Kraus
"La historia del amor."
                         
                    No se por que empiezo con esta cita. Tal vez porque sentí algo estremecerse en mi interior cuando la leí. Tal vez porque siempre quise sentirme así. Tal vez por que esta idea vino a mi un par de capítulos después de haberla leído.
                    Puede ser ese cuaderno en blanco que llego a mi por casualidad hace unos días. Ese tipo de cuaderno que siempre quise poseer, pero nunca fue mi deseo tan fuerte como para comprarlo. Tal vez sea el hecho de que no sea azul como siempre lo había imaginado, si no naranja, tal vez es eso lo que hace que ese cuaderno sea tan real. Que no es como me lo había imaginado.
                   Puede que sea algo temprano para empesar a escribir así. Con tan solo 16 años de edad, tal vez debería esperar hasta que sea mas mayor. Cuando haya tenido mas decepciones, cuando haya tenido mas alegrías. Pero se que si lo escribo dentro de algunos años, nunca sera igual que ahora. Nunca lograre las frases que pensé hace tan solo unos minutos.
                  Se que no es lo ideal usar una frase de un libro que todavía no termine de leer. Pero causo un impacto en mi. No es algo que haya sentido por alguien, pero logro entenderlo. Comprendo esa sensación de felicidad y de dolor. Como con mi cuaderno, no es como me lo imagine, pero por alguna razón es mejor de como lo imagine. Es algo que nunca hubiera sido capas de imaginar, porque es real.

                             Hoy murió una persona que conocí. Hable con ella solo un par de veces. No era alguien cercano. No fue mi perdida. No era mi mejor amiga, no era una persona con la que tuviera confianza. Hasta el día de hoy no recordaba su nombre. No pensaba en ella cuando no estaba conmigo. Nunca me detuve a pensar en ella por mucho tiempo. No se que cosas le gustaban, no se que cosas quería. No se que la hacia llorar o que reír. Nunca tuve una conversión con ella que no fuera en grupo. Me acuerdo que una vez las dos estábamos del mismo lado en una discusión. Eso fue lo mas cerca que estuvimos. No puedo llorar por ella, no la conocí realmente. No puedo dar mis condolencias, por que no se quien la conocía realmente. No se como murió, y no se donde esta ahora.  No se quienes son sus padres, ni sus amigos mas cercanos. Se que le gustaba Yellow Submarine y que lamento que ya no este mas. Lamento nunca haber llegado a conocerla. Lamento saber que nunca mas voy a volver a verla. Solo quiero decirle adios. Espero que estes donde estes, tengas paz.

          ..."¡Quisiera volver a ser una niña, medio salvaje, fuerte y libre; reirme de las injurias, no enloquecer por ellas!"...
                                              Cumbres Borrascosas.

                     Tal vez eso sea el amor. Sentir que todas las veces que sufriste, que todas las veces que sonreíste  tuvieron sentido. Porque te estaban guiando a este momento, a esa persona. Y por una vez todo tiene sentido.

                    Hay momentos en la vida en los que me planteo mi existencia, donde pienso quien soy ahora, quien era antes y quien pienso que seré en el futuro. Hoy cumplo 16 años de vida, 16 años de existencia, 16 años de cambio. Cierro los ojos y pienso que estaba haciendo este día el año pasado, veo lo que hice este año pasar por mis ojos. Nuevas experiencias, nuevas sensaciones, nuevas personas. Intente, logre, me decepcione, caí, me levante, me sentí perdida, me sentí en casa, me sentí sola, me sentí vacía, me sentí mas cerca de las personas de lo que nunca me había sentido, me lastimaron, lastime, corrí, espere, escuche, cerré los ojos y los abrí. Comprendi algunas cosas, conocí cosas nuevas, me sentí fuera de mi cuerpo, me sentí mas en mi cuerpo de lo que nunca había estado, vi cosas que solo son posibles en mi cabeza, vi cosas que nunca había imaginado, conocí personas, perdí algunas. Tuve miedo y todavía lo tengo, y a pesar de todo seguí.